Una vez reconocido que la reciprocidad primordial es organizada según el principio de lo contradictorio
, y que esta forma de reciprocidad es la matriz del ser consciente, podemos conceder al ser mismo la potencia de organizar el equilibrio de las fuerzas antagonistas necesario a su matriz.
El principio de lo contradictorio se vuelve una función del ser : esta función, la llamamos la “función contradictorial”. Ella se reproduce en cada una de ambas Palabras por principio de cruce
y principio de liminalidad
.