En una relación de reciprocidad simétrica, el “justo medio” se revela en sí contradictorio puesto que se encuentra al centro de dos dinámicas contrarias : es el Tercero incluido de la Lógica dinámica de lo contradictorio
. Se manifiesta al hombre como la sensación que la conciencia tiene de ella misma, y se expresa independientemente de la existencia del uno o del otro de los dos contrarios.
El Tercero de la reciprocidad simétrica, liberado de cualquier imaginario, no perteneciendo más a nadie, funda el deseo de los unos y de los otros. Sólo se despliega, sin embargo, si no está fetichizado en un imaginario, o sepultado en el poder.